El Qhapaq Ñan en Arica y Parinacota representan un vínculo tangible con las civilizaciones precolombinas y la integración de los Andes. Actividades académicas y culturales, como recorridos y charlas, buscan resaltar su relevancia y generar conciencia sobre la necesidad de preservar este legado para futuras generaciones.
Este Sistema Vial Andino, según UNESCO, fue la columna vertebral del poder político y económico del Tawantinsuyo. La red de caminos de más de 30.000 km de largo, conectaba varios centros de producción administrativos y ceremoniales, construidos en más de 2000 años de cultura andina pre-inca, cubriendo una extensa área geográfica, desde el centro oeste de Argentina y Chile hasta el sur occidente de Colombia.
En AYNI recorrimos el tramo del Qhapaq Ñan en Socoroma junto a la Fundación Monumentos y conversamos con Patricia Arévalo, historiadora y directora de la Fundación Monumentos, en la visita a terreno con estudiantes de antropología de la Universidad de Tarapacá, donde abordó la influencia de la cultura incaica en Arica y la importancia del Qhapaq Ñan, conocido también como los Caminos Troperos.